sábado, 19 de mayo de 2012

Realidad que cae

Se desparrama el cielo sobre mí.

No son los montones de estrellas,
no es la lluvia cálida
y no es la noche.

Se desparrama el cielo sobre mí.

No estrellas refulgentes,
no lluvia sanadora,
no cielo nocturno.

Sonámbula.

Lo siento sobre mis hombros,
lo siento resbalando por mi espalda,
lo siento quebrándose a mis pies.

Sonámbula.

Sólo quiero sentir:
el frío de la arena en mis plantas,
los rayos tenues del sol sobre mí piel,
la brisa suave tocando mi cara.

Sonámbula.

Quisiera sentir
que vivo
dentro del sueño.

Con el propósito de no sentir
esta realidad tan triste
cernirse (cual grava ardiente)
sobre mí.


DG.


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