A veces la distancia,
y a veces esa cómplice horrorosa
la desidia.
A veces el soñarte
y no poder tocarte
cuando (y cuanto)
me venga en gana.
A veces es sólo
la extrañeza de tu piel
en mi piel.
Pero,
casi siempre:
-encontrarte
reencontrarte
besarte
volverte a besar
tomarte
de la mano
tomarte.
Y tu piel,
recordarte,
recordarla,
recordar.
A veces la palabra,
la palabra buena,
la palabra mala.
A veces
y casi,
casi siempre.
DG.
No hay comentarios:
Publicar un comentario